¿Qué color es el adecuado para pintar mi casa?
Lo primero que debes tener en cuenta a la hora de elegir un color para pintar una habitación de tu casa es el tamaño, ya que se trata de un factor clave y que afectará en gran medida a la elección. Por ejemplo, si vas a pintar una estancia muy pequeña no te recomendamos pintarla en un color fuerte, ya que éste hará que dicho cuarto se vea aún más reducido de lo que realmente es. Por el contrario, una habitación de grandes dimensiones acepta de igual manera colores fuertes y suaves.
El segundo factor que debes considerar es la luminosidad de la estancia. Si tu salón es muy luminoso, es decir, le entra luz solar durante gran parte del día, puedes utilizar tonos claros (blancos, beiges, etc) o tonos fuertes (granates, naranjas, marrones). De hecho, lo ideal y lo que te recomendamos es que mezcles ambos. Por ejemplo, puedes pintar el techo de blanco, un par de paredes de color gris clarito y otras dos en un gris más oscuro o de color marsala, que está muy de moda este año.
Paleta de colores
Seguidamente, cuando ya has valorado el tamaño y la luminosidad debes seleccionar el color, obviamente, en función de tus gustos, pero también de tus objetivos. Es decir, depende del ambiente que quieras crear en la estancia puedes utilizar un color u otro. Recuerda que los colores transmiten sensaciones: el verde se relaciona con la naturaleza, el azul con el mar y el cielo, el naranja aporta energía, el gris y el negro son colores que aportan elegancia, etc.
Y sin duda, el color que jamás debe faltar en tu casa es el color blanco, líder absoluto en cuanto colores de pinturas para el hogar se refiere. El blanco es un tono que genera muchísima luz y amplitud y es la opción ideal para aquellas personas que centran la decoración de su casa en el mobiliario y en los elementos para adornar las paredes como fotos, cuadros, repisas, estantes, vinilos adhesivos, etc.
Asimismo, los colores de gamas azules y verdes son los mejores para dormitorios debido a sus propiedades relajantes y su amplia gama de tonos. Son perfectos, por ejemplo, para cuartos infantiles o de personas mayores. La gama de los rosas, que muchas veces asociamos erróneamente a niñas pequeñas, resulta genial para calmar los ánimos, por lo que viene muy bien en habitaciones en las que deseamos descansar.
Por su parte, el color rojo pueden venir muy bien en espacios en los que deseamos plasmar energía. Queda ideal en el hall o entrada de la casa. Lo cierto es que quizás no sea el color más recomendado para dormitorios ya que puede resultar demasiado estimulante. Pero esto ya depende del gusto de cada uno.
Los negros y los grises, en pequeñas dosis, pueden resultar muy elegantes, peroquizás sean más adecuados para espacios comerciales u oficinas.