COLORES PARA PINTAR EN INVIERNO
Hay dos formas:
Aplicar color, es decir, pintar de color las paredes. Puede ser con un mismo tono para toda la estancia, o combinando un color intenso con un tono neutro casi blanco, o directamente en blanco.
Puedes pintar de color las paredes perpendiculares a la pared donde se encuentra la entrada de luz -la ventana-. Del mismo modo, esa combinación puede ir más allá y podemos empapelar una de las paredes para vestir el espacio.
Para llevar a cabo esta primera opción puedes combinar colores potentes con tonos neutros suaves como el merengue o el blanco. A no ser que prefieras apostar por combinar tonos neutros -blancos, grises, beiges- con un papel en cuadros o estampado floral con motivos botánicos y campestres, tan de tendencia esta temporada y al mismo tiempo tan atemporales.
La segunda posibilidad es aportar color en el mobiliario o la decoración. En esta opción la propuesta se basa en pintar las paredes en tonos neutros que no nos condicionen al decorar. El color neutro puede seguir en el mobiliario y sofás en grises, tostados, blancos, marrones y hacer aparecer notas de color como un puf estampado, una butaca de color mostaza en terciopelo, una lámpara de hierro amarilla, una consola azul, cojines de flores multicolor… ¡el límite lo pone tu imaginación!