Claves para conseguir una decoración de estilo retro
Si quieres conseguir una decoración retro en tu hogar tienes que tener muy en cuenta la combinación de colores, texturas y materiales, la mezcla de diseños y volúmenes. Hay muchas formas, texturas y colores que nos pueden ayudar a crear un ambiente retro. Veamos cuáles son:
Colores y estampados retro
En la década de los 50 y 60 se llevaban los tonos suaves tipo verdes, amarillos o azules, y los contrastes, combinando el rojo, el amarillo mostaza y el blanco con el negro. Más tarde, en los 70 marcaban tendencia los colores más chillones y brillantes como pueden ser el rosa fucsia, el naranja butano o el verde lima.
De todas formas, hay algunas combinaciones de tonalidades que son super típicas de esta época: blanco-negro, rojo-negro, rojo-blanco-negro. También cabría destacar el marrón-marfil y el turquesa-fucsia.
En cuanto a los estampados podríamos destacar las formas geométricas.
Materiales y texturas retro
De materiales tenemos que hablar de los tipo metálicos, como pueden ser el aluminio, y los plásticos, propios de la década de los 50.
Sin duda, el vinilo y el cuero son distintivos de la decoración retro, pero lo más característico es la combinación de los materiales en un mismo elemento, como por ejemplo las sillas de cuero con patas de aluminio.
El vidrio y el cristal también juegan un papel importante en los complementos.
El terciopelo y el peluche son las texturas más populares.
Mobiliario retro
Para que una habitación sea retro basta con incluir algún mueble típico de la época: una mesa redonda con pie tulipa, un puff de terciopelo, un sofá de estampado animal o multicolor...
Complementos retro
El vidrio y el cristal son los materiales más acertados para conseguir un estilo retro.
Si quieres un estilo retro total, pon una moqueta estampada en el suelo o cúbrelo con baldosas de dos colores formando un tablero de ajedrez.