La madera como accesorio en una decoración con carácter rústico
Los materiales naturales siempre son un complemento que encuentra fácilmente su lugar en cualquier esquema decorativo. De un estilo nórdico a uno bohemio, pasando por estilos más tradicionales como el rural o rústico o un drástico estilo industrial.
Entre los materiales que mejor pueden integrarse en una propuesta decorativa está sin duda la madera. Existen tantas variedades en textura, color y carácter en la madera que es virtualmente imposible no encontrar un lugar para una pieza de mobiliario, un elemento decorativo o incluso una parte estructural de una habitación, que esté fabricada en madera.
Esta “máxima” decorativa es particularmente cierta para lo que se denomina estilo “rural”. Esta forma de entender la decoración que se nutre del estilo country americano y que se distingue del clásico estilo rústico por tener muchos menos accesorios y dejar el protagonismo a los grandes muebles rurales y a los grandes elementos estructurales, sin saturar el espacio de accesorios pequeños y de detalles.
Es por ello que, en este tipo de decoración, inspirada en grandes casas en el campo, la pintura en tonos naturales y térreos se combina de forma extraordinaria con el uso de grandes vigas de madera, generando una línea decorativa elegante, pero a la vez calurosa y hogareña.
El tercer elemento que cierra esta decoración inspirada en la naturaleza y la idea romántica de una hacienda en medio del campo son los textiles naturales, ricos en texturas y sensaciones, como puede ser la lana, el algodón y el lino.
Al elegir elementos en madera, es muy apto en este estilo rústico el privilegiar madera sin tratar, lo más natural posible, o incluso elementos que hayamos trabajado en bricolaje personal: un cuadro en madera de palet reciclada, vigas de madera bruta, e incluso acabados murales en madera complementando una pintura para interiores en beige o marrón pueden resultar una opción con estilo y gran personalidad.
Un post de Carla Martínez. Twitter: @carlapazmtz