Color mostaza, un must en la decoración de interiores

Por experiencia sabemos que el amarillo no es un tono muy popular y que la gente suela alegir a la hora de decorar su hogar y pintar las paredes de los salones o los dormitorios. Sabemos que es un color ciertamente atrevido y algo arriesgado y que, para acertar al usarlo, hay que saber combinarlo bien. Si nos pasamos puede acabar resultando un color demasiado pesado o muy abrumador.

Pero, no todas las tonalidades del color amarillo son iguales... Hay amarillos más fuertes, más vibrantes, cercanos al naranja, al marrón. Hoy queremos hablaremos de un amarillo concreto, el color mostaza. Se trata de un tono que está pegando muy fuerte desde hace unos pocos años. Es un amarillo fuerte cercano al ocre, que se ha ido popularizando en la decoración de interiores hasta llegar a convertirse en un must de la misma. El secreto de este color radica en saber usarlo siempre en su justa medida, sabiendo escoger el color que lo complementa y así lograr el equilibrio.

Si te condieras una persona a la que le gusta arriesgar un poco y que quieres que tu casa sea diferente al del resto, si quieres decorar tu hogar con un color que lo llene de energía y vitalidad, entonces te aseguramos que el color mostaza es lo que buscas. Eso sí, ¡mucho ojo! el que avisa no es traidor ;) recuerda que debes tener muy claro cómo vas a usarlo antes de ponerte manos a la obra. Si te pasas te vas a cansar muy pronto de él porque, como decíamos, es un tono que hay que saber usar en su justa medida.

Por ejemplo, no se te ocurra pintar las 4 paredes de tu salón de color mostaza. Quizás una pared en color mostaza ya sea suficiente. También depende mucho del tamaño de la estancia, de lo luminosa que sea, etc. Además, también puedes optar por escoger algún mueble de este tono, algunos cuadros, una mantita para el sofá o los cojines, y otros complementos del hogar que den pinceladas de color, pero en su justa medida.

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